Hace mucho tiempo que me enamoré de las alfombras de patchwork, he dedicado muchas horas a estudiar distintas técnicas y a probarlas, tuve que construirme alguna herramienta que todavía conservo y después de todo esto decidí que la que quería hacer era la tradicional realizada con tiras de tela trenzadas y cosidas entre sí.
Para ello comencé a probar distintos tejidos y grosores de las tiras. Al final decidí utilizar tela de algodón de camisetas y para ello fui haciendo acopio de ellas en los cambios de armario de toda la familia hasta que conseguí suficiente material de trabajo.
Luego llegaron las pruebas de ancho de las tiras, colores etc, de todo este trabajo teneis varias entradas antiguas que realicé a lo largo de tiempo los domingos por la mañana.
Este año en Octubre decidí que ya era hora de realizar la alfombra y dejar de seguir haciendo pruebas.
Quería colocarla en la entrada de casa, necesitaba una determinada medida para que quedara bien que no sobrara ni faltara ninguna vuelta. Elegí las telas entre todas los ovillos que había recortado y descarté los colores claros que son menos sufridos dado el sitio donde iba a ir colocada.
No pongo las fotos del proceso de corte de las telas y la unión entre ellas porque esta entrada duraría mucho y no es cuestión de cansaros.
Tuve que deshacer alguna de las pruebas para rescatar colores
trencé durante 12 horas, (medí el tiempo por curiosidad)
El ovillo aunque no lo parezca es del tamaño de un balón de fútbol
Rematado del extremo del ovillo
Primeras puntadas una vez decidida la medida del centro
Primer cambio de color
Segundo cambio de color
Solo falta un cambio de color el último va a ser todo negro.
Le he dedicado dos días a la semana dos horas cada día como podéis ver con la base de corte, mide 16 pulgadas ya sólo faltan cuatro pulgadas de ancho, cinco vueltas de trenza ¡ahí es ná!
Queda trabajo para cuatro días mínimo pero aquí la tenéis, cuando la termine os la enseñaré en su ubicación definitiva.
Espero que hayáis disfrutado la entrada tanto como yo haciendo la alfombra.
¡¡Tengo unas ganas locas de terminarla pero me puede el ansia de enseñarla!!,