No soy muy de contar mi vida en el blog ni de poner fotos de nadie, pero como es un día muy especial para mí aquí me tenéis, sonriente y feliz, a punto de realizar mi sueño, siempre quise estudiar, llegar a la Universidad, por muchos motivos que no vienen al caso no pude llevarlo a cabo hasta ahora, hace cinco años empecé esta aventura y ahora a punto de cumplir los 56 me he graduado.
¡Ayer fue uno de los días más felices de mi vida!
Como toda quilter que se precie tengo mi "Pulsera de dijes de plata" y en ella dijes que me recuerdan momentos especiales (no podían faltar las tijeras, botón y dedal)
Con motivo de la celebración de ayer mi marido y mis hijas me regalaron uno muy especial
Una paleta de pintor con sus colores y pinceles que representa mi graduación en Bellas Artes.
Ayer también era el día internacional del Patchwork (¿sería una señal?) y mi hermana para celebrar mi graduación no me hizo un regalo si no dos
Un colgante que se puede convertir en broche de la Sunbonnet Sue
Y una pulsera de hexágonos, dos de los motivos que más me gustan, los dos son de
Quilt Joia
Detrás de esta marca unas personas estupendas, que en un tiempo record hicieron posible que el regalo llegara a mis manos un día tan señalado.
Después de la graduación seguimos con la fiesta y fue una noche maravillosa.
Hoy no puedo decir que haya sido una labor de satisfacción inmediata pero si de mucha satisfacción y para terminar voy a poneros un poema que nos leyó la Decana de la Facultad y que Nelson Mandela utilizó en su toma de posesión como Presidente, con el que me he sentido muy identificada.
INVICTUS
Más allá de la noche que me cubre
negra como el abismo insondable,
doy gracias a los dioses que pudieran existir
por mi alma invicta.
En las azarosas garras de las circunstancias
nunca me he lamentado ni he pestañeado.
Sometido a los golpes del destino
mi cabeza está ensangrentada, pero erguida.
Más allá de este lugar de cólera y lágrimas
donde yace el Horror de la Sombra,
la amenaza de los años
me encuentra, y me encontrará, sin miedo.
No importa cuán estrecho sea el portal,
cuán cargada de castigos la sentencia,
soy el amo de mi
destino:
soy el capitán de mi alma.
Invictus, un poema de
William Ernest Henley (Long John Silver) leído por Mandela